Los niveles de contaminación presentes en la CDMX, que han llevado a las autoridades a decretar una alerta de salud, generan afectaciones físicas en los ciudadanos de la capital y provocan la potencialización y contagio de enfermedades.
El aire contaminado aumenta el riesgo de padecer enfermedades respiratorias agudas (como neumonía) y crónicas, como cáncer de pulmón y enfermedades cardiovasculares, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Si bien la contaminación afecta a todas las personas, el organismo advierte que los efectos más graves se producen en las personas que ya están enfermas, así como en los grupos más vulnerables: niños, adultos mayores y familias con un acceso limitado a la asistencia médica.
La OMS calcula que 1,3 millones de personas en el mundomueren en un año a causa de la polución atmosférica urbana, y más de la mitad de esos casos ocurren en los países en desarrollo, entre ellos México. El Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) mexicano reportó en marzo que en el Valle de México mueren 20.500 personas al año por esta causa y, de continuar la crisis ambiental que vive la capital, la tasa de mortalidad vinculada con la polución podría crecer hasta 19%.
El mayor riesgo es para las personas que ya tienen un padecimiento cardíaco o respiratorio, cuya condición puede agravarse. “Existe el riesgo de que la población del Valle de México desarrolle asma o se exacerben los cuadros asmáticos de quienes padecen esta enfermedad”, ha advertido Patricia Segura, jefa de Investigación en Hiperreactividad Bronquial del INER. La concentración de ozono –principal causa de la actual crisis ambiental en la capital mexicana- “agrava el asma y afecta directamente al hígado también”, agregó el alcalde.
Aunque no padezcan alguna enfermedad, los niños, los adultos mayores y las embarazadas son también un grupo vulnerable: en el caso de los bebés, la afectación se puede manifestar en la disminución del desarrollo de su sistema respiratorio.
¿Qué debo hacer para disminuir riesgos?
Reducir la contaminación ambiental es tarea de todos y tenemos en nuestra mano muchas medidas para solucionar la contaminación. Cualquier pequeña acción respetuosa con el medio ambiente contribuye a que mejore nuestra calidad de vida.
– El reciclaje es una forma de disminuir la contaminación porque aprovechamos los recursos y evitamos algunos procesos de fabricación que generan gases nocivos.
– Utilizar el transporte público contribuye a que un único vehículo lleve a muchas personas, por lo que contaminamos menos que si cada uno va en su propio coche.
– Compartir transporte también es una buena forma de reducir la contaminación.
– Si pensamos en cambiar de coche, lo mejor es elegir uno de bajo consumo o eléctrico. En caso de que prefiramos uno tradicional, debemos tener en cuenta que los de diésel son los que más contaminan.
– Todos los vehículos necesitan revisiones, al menos una vez al año. De esta forma podremos comprobar que el nuestro no contamina más de lo permitido y lo repararemos enseguida si detectamos alguna irregularidad.
– Caminar o ir en bicicleta son las dos maneras menos contaminantes de desplazarse.
– Cuando vayas a utilizar productos con sprays, como los que se emplean para acabar con los mosquitos, fíjate en que el envase sea respetuoso con el medio ambiente y, por tanto, no desprenda gases invernadero. Éste es el símbolo que indica que se trata de un recipiente ecológico.
– Las zonas verdes de las ciudades son como pulmones que generan oxígeno. Debemos cuidar estos espacios y contribuir en todo lo que podamos a que cada vez haya más recintos con árboles y plantas.
– Utiliza bombillas de bajo consumo para conseguir la misma cantidad de luz pero utilizando la energía de forma eficiente. Además, con esta medida conseguirás ahorrar
– Trata de no derrochar el agua. Ducharnos en lugar de bañarnos, usar grifos para economizar el agua o tener un sistema de doble descarga en la cisterna del baño son algunas medidas útiles y sencillas para conseguirlo.
– Evita utilizar cubiertos y vajilla de plástico desechable o que no sea biodegradable.
– Intenta consumir productos sostenibles, como hortalizas ecológicas (cultivadas sin pesticidas contaminantes).
¡Reduce la contaminación del aire en casa!
Cómo evitar la contaminación del aire en nuestro hogar es una cuestión que nos preocupa frecuentemente, sobre todo si tenemos niños. La polución de la ciudad también afecta a las viviendas y a los lugares de trabajo que allí se encuentran ubicados. Por eso es importante reducir la contaminación del aire interior. Además de las acciones que ya hemos comentado, hay otras medidas que podemos aplicar a nivel doméstico que nos ayudarán a respirar un ambiente limpio y saludable cuando estemos en casa:
– Ventilar la casa a diario.
– Tener plantas de interior.
– No fumar en espacios cerrados. Es preferible salir a la terraza o habilitar una zona para fumadores que esté aislada del resto de la casa y que se ventile fácilmente.
– Mientras que freímos alimentos estamos contaminando el aire de nuestra vivienda. Por eso, cuando lo hagamos es necesario que utilicemos un extractor o que ventilemos la cocina abriendo bien las ventanas.
– Los purificadores de aire son perfectos para limpiar el ambiente y que éste sea saludable. Además, ayudan a prevenir alergias y mejoran los síntomas de quienes las padecen.
– Si dispones de aire acondicionado en casa, no abuses de su uso y asegúrate de que lo pones a una temperatura ideal con la que mantener las habitaciones frescas sin necesidad de pasar frío.