Fantasía o realidad, las sirenas son tema que por siglos los hombres han tratado para descifrar lo que se dice de ellas. Muchos creen que fueron seres humanos que evolucionaron para poder vivir bajo el agua, pero hasta hoy no existen indicios de que existan.
Actualmente las redes sociales son un medio donde podemos acercarnos al mundo por ello se han presentado videos donde puede observarse a “supuestas sirenas”. El más famoso es, quizá, el de Kiryat Yam en Israel donde dos turistas grabaron a una sirena que posaba sobre una roca junto a la playa, ella mira a la cámara y luego salta al mar.
Las sirenas en la historia
La literatura las enaltece y el cine las honra. En la mitología griega se dice que se trataba de seres con cuerpo de pájaro y rostro o torso de mujer, que se distinguían por una voz musical, hipnótica. Según la tradición, ellas habitaban en una isla del Mediterráneo frente a Sorrento, en la costa de la Italia meridional (en ocasiones se alude concretamente a Capri). El primer testimonio escrito que se tiene de ellas es su mención en La Odisea de Homero. Sin embargo, ya figuraban con esa forma en las representaciones artísticas más antiguas de Grecia, en monumentos y ofrendas funerarias. En ese tiempo se les vinculaba con el otro mundo, con el de los espíritus de los difuntos.
En el siglo XVI, las sirenas eran representadas con un espejo y un peine en la mano, su cola era un emblema de prostitución y el espejo, considerado como objeto mágico, era atributo de la mujer impura que servía para contemplar el rostro de la Muerte o el culto al Diablo. También aparecen amamantando a sus crías y se pensaba que su leche era un alimento sobrenatural que permitía la recuperación de los héroes abandonados en el agua.
En Medio Oriente, las primeras historias aparecieron en Asiria, antes del 1000 a. C. Ahí se representaban también con medio cuerpo de pez y su existencia se debe a una leyenda que cuenta que Derceto ofendió a Venus y la diosa le inspiró amor haciaun pastor. De este amor nació una niña: Semíramis, que llegaría a ser reina de Babilonia. Después de nacer su hija, terminó el amor. Derceto, llena de ira, abandonó a su hija, mató al hombre a quien había amado y se arrojó al agua dispuesta a suicidarse pero los dioses no lo permitieron. Así dio origen a su morfología anfibia. La diosa fue adorada en templos en los que había grandes estanques y puesto que era la deidad que gobernaba los mares, sus sacerdotes solían vender licencias de pesca a los marineros.
En las Islas Británicas las sirenas eran presagios de mala suerte. Ellas podían nadar en agua dulce y llegar hasta los ríos o lagos y ahogar a sus víctimas. Algunas eran descritas como monstruos grandes, de hasta 600 m.
Actualmente...
El Parque Nacional de Ise-Shima alberga el Gran Santuario de Ise, pero también numerosas pesquerías de perlas a lo largo de su magnífico litoral. El Gran Santuario de Ise, se encuentra a aproximadamente 1 h 30 en tren desde Nagoya, es el más venerado de todos los santuarios shinto de Japón. Otro sitio importante es Toba, a 20 minutos en tren o a 40 minutos en autobús desde la salida de Ise, es una ciudad portuaria famosa por sus “rocas casadas” (Meoto-Iwa), dos islotes entrelazados por una cuerda gigante, uno de los lugares de veneración más sagrados del archipiélago. No dejen de visitar la Isla de las Perlas, donde las primeras perlas de cultivo fueron producidas.
Sirenas de carne y hueso
- Aunque la ciencia diga lo contrario, en Sacramento las sirenas sí existen. Si quieres tener un encuentro cercano con ellas sólo dirígete a Dive Bar, un refugio para escapar de la rutina de la ciudad. Aquí, entre cervezas y música, los clientes disfrutan de la actuación de dos sirenas y tritones que se mezclan con los peces dentro de un tanque de 7,500 galones. Con sus largas colas y trajes llamativos realizan diferentes espectáculos bajo el agua y seducen a los espectadores a través de un cristal.
- En el parque Weeki Wachee Springs en Spring Hill, Florida, las sirenas también son una atracción para los turistas. El marino Newton Perry fue el primero en abrir este parque acuático en 1947. Él construyó un pequeño teatro con 18 asientos en un manantial cerca de Tampa y contrató a jóvenes atractivas para bucear en sus aguas. Les enseñó a sonreír y respirar mediante un tubo de goma que suministraba oxígeno mientras nadaban bajo el agua. Incluso aprendieron a beber y comer mientras buceaban.
Fuente: Forward Travel