Un desayuno saludable es la mejor forma de empezar el día, te aportará nutrientes y también la energía suficiente para todo el día.
Incluir en tu desayuno frutas es una excelente forma de lograrlo, además es deliciosa, pero hay algunas frutas que son más recomendadas que otras.
Solemos comer papaya, melón o plátano a la hora del desayuno, pero también podemos consumir otras que son iguales de deliciosas y hasta puedes llevarte en tu bolsa.
Manzanas
Aportan fibra que te ayudará a tener una buena digestión, son perfectas para la mañana y puedes consumirla en algún smoothie, acompañadas en una ensalada frutal o hasta a mordidas.
Toronja
Son deliciosas y tienen mucho agua, es perfecta para iniciar el día ya que su sabor ácido propicia una bajada de insulina lo que ayuda a que tu cuerpo almacene menos grasas.
Sandía
Otra fruta que contiene mucho agua, te saciará sin tener demasiadas calorías. Es perfecta para los días calurosos.
Plátano
En tu cereal, en un pan o en un smoothie, es una fuente importante de potasio, fibra y otras vitaminas. Puedes comerlo también con avena.
Frutos rojos
Como las fresas, las cerezas y las frambuesas tienen grandes cantidades de fibra y son bajas en calorías, además tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorios, además de una gran cantidad de vitamina C.
Naranjas
Al igual que los frutos rojos, tienen propiedades antioxidantes, perfectas para rejuvenecer tus células, además previene el estreñimiento, ya que tienen una acción diurética.
Procura comerla sola y no en jugo, ya que en grandes cantidades contiene demasiada azúcar.
Piñas
Es otra fruta que te ayudará a depurar tu organismo, eliminar grasa, tiene propiedades antiinflamatorias y posee vitaminas A, B, y C.
Kiwi
Es una fruta con mucha vitamina C, fortalece el sistema inmunológico y ayuda al funcionamiento del sistema nervioso, además regula los niveles de colesterol y es una fuente de ácido fólico.
Otros consejos:
Acompaña las frutas con otros alimentos que contengan proteína y carbohidratos sanos como pan integral, huevo, tortilla de maíz, yogur, queso.
Si no te gustan las frutas, puedes ingerir smoothies o incluir más porciones de verduras.
Un desayuno saludable aportará energía que también te ayudará a mantener un buen estado de ánimo.
Evita alimentos con carbohidratos refinados como el pan blanco, cereales industriales, pasteles.
Cuida el azúcar que consumes en el desayuno, las frutas ya contienen la cantidad necesaria para consumirla.