Sin duda, uno de los elementos más característicos de las ofrendas de Día de Muertos en esta temporada es la flor de cempasúchil.
Esta flor tiene un gran valor simbólico en nuestro país, sobre todo en estos días, pero… ¿de dónde surgió esta tradición?
El origen de la tradición
Comienza desde los aztecas, ya que creían que su color amarillo evocaba al Sol, y de esta manera se convertían en una guía para las almas de los difuntos.
Las flores se deshojaban y los pétalos de cempasúchil solían usarse para formar un camino desde la puerta de la casa hasta el altar de muertos, de manera que los espíritus encontraran el camino hacia sus seres queridos.
Se utilizaba esta flor ya que florece en los meses de septiembre y octubre, no es común verla en otra época del año.
Usos
Nuestros antepasados las empleaban para hacer remedios medicinales que aliviaban los cólicos y combatían los parásitos intestinales, además servían como un abono para el control de plagas en plantas.
Otras flores
Flor Nube. El color blanco en la ofrenda simboliza la pureza de las almas.
Flor Terciopelo. Se utiliza en esta temorada debido a sus tonos blancos y rojizos, muy ligados al Día de Muertos, ya que el morado es el color tradicional del luto en México.