30 C
Mexico City
viernes, abril 19. 2024

Escucha Radio Felicidad en

Cómo sanar las heridas del pasado

- Publicidad -

ACIR Online

Te ayudamos a reflexionar sobre cómo sanar las heridas del pasado.

Todos hemos tenido alguna situación difícil en nuestra vida y no hay que tener vergüenza de aceptarlo.

 

Todo acto, toda experiencia vivida a lo largo de nuestro ciclo vital, es un aprendizaje que integrar en el baúl de la memoria, de las emociones, y de nuestro crecimiento personal. No debemos “estancarnos” en el ayer.

 

En Radio Felicidad, te invitamos a que reflexiones sobre el pasado.

 

El pasado nos edifica como personas. Sucede que en el algún momento de tu vida, al hacer un balance, percibes que pesan más las heridas que los hechos enriquecedores.

 

Las pérdidas, las desilusiones y los fracasos, ya sean emocionales o laborales, suelen ser esas dimensiones que más daño nos hacen y que, en esencia, más nos impiden avanzar.

 

Para afrontar esa sensación, te damos unas claves básicas para superar el pasado:

 

    1. No busques culpables, avanza sanando los rencores y el odio

 

Perdonar nunca es fácil. ¿Cómo hacerlo si esa persona se comportó de modo egoísta? ¿Cómo perdonar a quien nos hizo daño de forma expresa y voluntaria? En ocasiones, nos encontramos con ese tipo de personalidades que, lejos de ofrecernos un amor sincero y altruista, nos hieren.

 

Ten en cuenta que quien odia es al final prisionero de esa persona que le hizo daño una vez. Seguimos unidos por un cordón umbilical que nos aferra y que, a su vez, nos enferma.

 

Enfadarse es aceptable. Sentir ira, rabia e incluso frustración es lógico durante un tiempo. El suficiente hasta que dure ese desahogo emocional donde las lágrimas y el refugio de la soledad pueden ayudarnos a “liberar cargas”.

 

No obstante, esta situación nunca debe alagarse más allá de los tres meses. Pasado ese tiempo, hay que aceptar lo ocurrido y perdonar.

 

   2. El perdón es una forma de liberarnos, de dejar atrás y avanzar.

 

El perdón debe dirigirse a la otra persona y también a ti mismo. ¿Por qué razón? Hay quien se culpabiliza por haberse equivocado, por “haber invertido tiempo, vida e ilusiones” en quien no lo merecía.

 

Jamás te culpes. Acepta lo ocurrido y, simplemente, respira, asume y perdona. La liberación interior que sentirás te ayudará a curar heridas.

 

   3. Cuidado con la nostalgia y recordar el sufrimiento

 

Vivir envueltos por la nostalgia nos impide también superar el pasado. Es una manera de permanecer en el ayer sin ver nuestra realidad más inmediata.

 

La palabra “nostalgia” tiene su raíz en el griego y está formada por “regreso, o volver a casa” y “sufrimiento”. Sería, pues, una forma de seguir sufriendo al recordar el pasado, al recordar ese hecho del ayer.

 

No importa si ese momento que te causa nostalgia fue feliz o te produjo tristeza, lo que debemos tener claro es que vivir cada día alimentándonos de esa nostalgia es otro modo de ser “prisioneros”.

 

El tiempo pasado debe verse siempre con gratitud. Es vida que hemos experimentado y, como tal, como seres capaces de aprender, hemos de agradecerlo y después “dejar ir”.

 

La nostalgia tendría como función el poder acordarnos de aquel que fuimos y, a su vez, poder observar la persona que somos ahora.

 

Recuerda el pasado con con gratitud, pues te ha dado sabiduría. Las cosas buenas llegarán cuando nos concienciemos de que realmente las merecemos.

 

El pasado debe comprenderse, debe asumirse y después superarse. Una vez que nos liberamos de esas cargas, nuestro corazón se sana y nuestra mente se libera. Es el momento de esperar lo bueno que nos va a traer la vida.

 

Puede que haya pérdidas, pero lo que de verdad importa es el presente, ahí es donde debes levantarte como un ser valiente y con ilusiones renovadas.

 

 

 

con información de Mejor con salud

- Publicidad -

Radio Felicidad en Iheart Radio