Justo el fin de semana pasado todos partíamos la Rosca de Reyes y tomábamos chocolate, una cosa sumamente deliciosa, pero sabías que agregarle bombones a tu bebida tiene grandes beneficios a la salud.
Resulta que estaba reunida con mi familia y a mi primo se le ocurrió poner minigolosinas a mi delicioso chocolate –cosa que yo jamás había intentado, aunque lo he visto infinidad de ocasiones en las películas– y fue justo en ese momento en el que mi mamá mencionó que gracias a eso que había hecho, esa noche no tendríamos tos.
Resulta ser que los malvaviscos fueron creados para efectos medicinales y a aquellos niños que presentaban dolores de garganta se les recomendaba comerlos.
Estos son originarios de Egipto, el cual era un dulce de miel, espesado con savia de la planta de malvavisco, más adelante en el siglo XIX, los doctores extraían de las raíces de la planta su jugo y lo cocinaban con huevos blancos y azúcar, posteriormente lo amasaban hasta que se convertía en un merengue que dejaban secar, teniendo como resultado bombones chiclosos y pegajosos.
Ojo, además de curar el dolor de garganta son buenísimos para curar heridas y aumentar el sistema inmunológico.