Además de desempeñar un papel esencial en la salud digestiva, cardiaca y de la piel, también podría controlar el azúcar en la sangre, ¿necesitas más razones para comer fibra?
Aquí te las damos:
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Combate el estreñimiento: si eres de los que sufren al ir al baño, la fibra es indispensable en tu dieta, además de hacer ejercicio regular y beber suficiente agua.
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Te protege contra enfermedades: una dieta rica en fibra protege contra el cáncer de colón, esto gracias a sus componentes insolubles.
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Te ayuda a bajar de peso o por lo menos a mantenerte: la zanahoria, el apio, legumbres de hoja verde y manzanas contienen una gran cantidad de fibra y te ayudan a controlar tu peso.
¿Cómo? al requerir más tiempo de masticación, dan sensación de saciedad y al ser retenidos más tiempo en el estómago, ayudan a controlar la sensación de hambre.
Además, el consumo de fibra tiene otras muchas propiedades beneficiosas para la salud: su capacidad para reducir los niveles del colesterol en la sangre (reduce los niveles de LDL y respeta los niveles de HDL) disminuye el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Consumir 10 g de fibra diarios ya disminuye en un 14% las posibilidades de padecer una enfermedad coronaria. Las fibras solubles también retardan la entrada de glucosa en la corriente sanguínea, lo que las transforma en altamente beneficiosas para personas diabéticas.