En la CDMX el 90% de la población está expuesta a las pantallas digitales (ya sea por trabajo o gusto) durante un poco más de 8 horas, dando así paso a sufrir del ojo seco, provocando distintas molestias según la situación en la que nos encontremos.
La sequedad ocular es una enfermedad en la que la superficie ocular no se encuentra correctamente protegida por la lágrima, por un déficit en la cantidad o calidad de la película lagrimal o la combinación de ambas cosas.
Lo normal es parpadear cada 5 segundos, sin embargo, al fijar la mirada en una pantalla parpadeas cinco veces menos.
Causas del ojo seco:
- Uso de pantallas digitales
- Uso de lentes de contacto
- Algunos medicamentos
- Empleo de colirios con conservantes
- Envejecimiento
- Alimentación desequilibrada
- Cambios hormonales
- Factores ambientales
- Estrés
¿Cuáles son los síntomas?
- Irritación
- Ardor
- Sensación de sequedad
- Visión borrosa
- Sensación de arenilla
- Lagrimeo excesivo
- Pesadez palpebral
- Sensibilidad a la luz de la pantalla
¿Cómo prevenir el problema de ojo seco?
Lo primero que debes hacer para evitar este tipo de problema es:
- Usar pantallas de buena calidad y filtros que eviten los reflejos.
- Mantener una iluminación óptima en el lugar de trabajo.
- Disminuir el tiempo de exposición a las pantallas.
- Forzar el parpadeo.
- Realizar ejercicios oculares: mira cerca-lejos, izquierda-derecha y círculos.
- Usa lagrimas artificiales (2-4 veces al día).
Otras medidas para combatir el ojo seco son:
- Bebe dos litro de agua al día.
- No fumes y evita los espacios con humo.
- Si trabajas frente a una computadora, cada media hora descansa la vista durante medio minuto parpadeando a menudo.
- Utiliza un humidificador para llenar el ambiente de agua.
¿Qué hacer en caso de sufrir sequedad ocular?
Lo primero que debes hacer es ir a revisión y explicarle al especialista qué hábitos sigues en tu día a día y si tienes antecedentes médicos, esto es básico para saber qué causa la sequedad.
El experto tiene dos técnicas para determinarlo:
La prueba de Shirmer, mide cuánta lágrima fabrican los lagrimales. Consiste en poner una tira especial en los párpados, gracias a la cual se puede medir el grado de humedad en unos minutos.
La prueba de osmolaridad, esta es inmediata y se realiza analizando una lágrima para averiguar su calidad a partir de su composición.
